Daphne Ars: Leí: La Rosa inmortal de Quinn (Scanguards Vampires #6)

El 6° libro de la Saga Scanguards es la historia del playboy –así mismo se describe él en el libro de Zane-: Quinn.

Quinn, un guardaespaldas vampiro, ha vivido los últimos 200 años como un playboy, tratando en vano de olvidar a la única mujer que ha amado: su esposa humana Rose, que él cree muerta.

Pero Rose está muy viva. Ahora ella misma es un vampiro, ha vivido en la clandestinidad escondiéndose de Quinn todos estos años, después de haber fingido su muerte para ocultarle un terrible secreto - uno que sabe la conduciría a la muerte.

Cuando un vampiro poderoso y malvado amenaza con destruir al único descendiente de Rose y Quinn, ella no tiene más remedio que salir de su escondite y pedir ayuda a Quinn.

Quinn lucha con el shock de la reaparición de Rose, mientras se unen para luchar contra un enemigo común, reavivando las llamas de su pasado. Pero ¿la pasión que vuelve a encenderse entre ellos será suficiente para superar el secreto que los separa?

Conocemos a Rose, la que en vida fuera la esposa de Quinn, conmemorando su aniversario de transformación, escribiéndole a su hija –ya muerta para entonces, ya que ella la dejó siendo mortal- una carta contándole sobre su último descendiente: Blake. No obstante, en medio de la carta ya tenemos acción, la casa de Rose es irrumpida por Keegan y un par de matones, que están buscando algo que ella le quitó.

A continuación tenemos a Quinn humano en Londres de 1813 ¡Qué lindo! La historia típica pero acertada para los corazones románticos, Quinn no tenía una posición favorable en la alta sociedad, mientras que Rose era hija de un alto personaje de la misma, entonces él tiene que hacerse un nombre, o mejor dicho: un título, y lo más plausible era ir a la guerra y convertirse en un militar con honores. Ellos se casan a escondidas y como tienen una noche única, consuman su amor en breve, la noche anterior de Quinn partir a la guerra, allí evidentemente es herido, y sólo puede pensar en Rose, entonces llega su salvación: Él es transformado.

Volviendo a San Francisco: Oliver y Quinn tienen un accidente de autos bastante brutal. Oliver sale mal herido y queda al borde de la muerte, por lo que él decide transformarlo. Y de pronto, en medio de todo el caos de la transición de Oliver, Quinn recibe una llamado de Gabriel con su nueva misión, por parte de la señorita: Rose Haverford. ¡CHAN!

Y de una Rose le suelta, que Quinn tiene un tatar-tatara-tatara-tatara-loquesea nieto ¡Qué loca esta mina! El asunto es que Keegan la tiene amenazada de que si no le devuelve lo que le robó, él transformará a su nieto Blake, y Rose prometió a su hija que su descendencia sería normal y mortal, en todo caso, ella no le dice del todo la verdad a Quinn, y lo cierto es que la misión parece ser algo simple, ella le paga a Scanguards 1 Millón de dólares, pero Quinn tiene en mente otra clase honorarios profesionales ¡Diablos! Dale que te dooooooooooy, o sea Quinn es BRITISH ¿Cómo no darle?

Esa misma noche Quinn cobra, y puedo decir que esta vez juntos fue sexy pero fría.

Babeo:

“Thomas no sintió otra cosa que la conexión que sentía con todos los vampiros Scanguards. Era diferente con Eddie, el joven vampiro del que era el mentor y que vivía con él. Un vampiro heterosexual, intentó recordarse a sí mismo.”

Rose desconoce muchas cosas de los vampiros y eso que tiene 200 años, pero es que le tocó una mala vida, y sus experiencias con clanes medio cavernícolas no le dan una buena visión de que podría llevar una mejor vida. Por lo que se encuentra muy sorprendida con las implicaciones de vinculación, y más aún entre las especies.

Rose ha creado una cadena de burdeles de alta alcurnia y por ello es que el dinero no es una preocupación para ella. De pronto se sabe ipso facto quien transformó a Rose y por qué, y la verdad me resultó muy, muy interesante.

En este punto es EN SERIO que necesito que Thomas/Eddie pase, sufro con el pobre Thomas. Y hablando del sexy Thomas, el don que tiene es asombroso, y él no lo usa, y Keegan es su creador, ¡Bravo, Folsom!, no lo vi venir, de momento creí que sería Milo, pero quiero creer que lo está reservando para el libro de Thomas y Eddie, porque ESE libro tiene que venir.

La pelea estuvo entendible, y me gustó, no duró demasiado, sino lo suficiente.

Y luego Quinn encuentra su paz después de 200 años de sufrimiento: Tenemos la eternidad ahora…

El libro me pareció muy corto, pero lo esencial de la historia es el reencuentro, Blake pasa a ser una simple excusa para darle consecución a la acción, pero de que me gustó la historia de Quinn, me gustó.